jueves, enero 26, 2006

El llamado de la vocación (Coautoría con Bela D.N.)

La historia que voy a referirles cuenta cómo es que llegué a trabajar para lo que hoy, gracias a Dios, da sustento a mi familia. A pesar de los que se paran y se van, contaré mi experiencia para ustedes, si me acercan otro vaso de vino. Hasta el borde, por favor.

Cuando tenía veintitrés años holgazaneaba en mi casa desde la mañana a la noche, dependiendo de mis padres que ya encomendaban a los santos el esfuerzo que hacían por mí y llevaban mi carga como una cruz. Por aquel entonces ya me gustaba la buena vida, sobre todo cuando no pagaba por ella. Una tarde, casi ya de noche, salí de casa a comprar cigarrillos. Vivía en una zona bastante alejada, donde los vecinos distaban mucho unos de otros, separados por viñas y bodegas que a la hora del crepúsculo ya estaban cerradas. Prácticamente no conocía a nadie en los alrededores, porque solía despertarme de las borracheras a la hora en que los demás se acostaban. Y me levantaba para seguir de juerga. Caminaba entonces esa nochecita hacia el almacén más cercano, planeando volver a casa para cenar y ponerme el sombrero, accesorio que consideraba ideal para conquistar a las casquivanas que me divertían noche a noche. Luego de mi compra, volvía tranquilamente pitando y mirando los callejones bordeados de sauces cuando me llamó la atención una casa a la que nunca había visto. Parecía que sus dueños no se preocupaban mucho de ella, la madreselva ya había cubierto todo el alambrado y se proponía lo mismo con la portezuela de alambre que cerraba el paso. No debían recibir muchas visitas, porque el caminillo principal que conducía a la puerta de entrada estaba invadido por malezas que albergaban un sinnúmero de alimañas, a las que escuchaba desplazarse y crujir entre los yuyos. Una selva en miniatura. Fijando la vista para eludir las sombras que ya se proyectaban sobre la fachada, observé que la puerta principal estaba entreabierta, y que del umbral de ésta pendía una pequeña campanilla, unida a un largo cordel que llegaba hasta la puerta de alambre junto a mí. Esto me tentó a la correría infantil de llamar y alejarme a trote rápido, pero una vez que lo hice no pude despegar un pie del suelo.

A la altura del zócalo, en el marco de la puerta, asomó la cabeza de alguien, a mi entender, que había caído. Supuse que había llegado en el momento justo para ayudarlo a incorporarse, quebrado o desmayado por vaya a saber qué cuestión. Me disponía a forzar el herrumbrado cerrojo cuando la cabeza empezó a moverse, con la vista clavada en mí. Sus esfuerzos eran tan grandes que podía ver los tendones del cuello tensarse como cadenas. Poco a poco fue emergiendo de la penumbra de la morada el cuerpo que ésta arrastraba. La cabeza clavaba ya la mandíbula en el ripio del camino, pinchando sus ojos con los espinillos y rasgando la piel con las cortaderas. Estupefacto observé cómo el cuerpo flácido avanzaba centímetro a centímetro por la senda, ante el silencio surgido en la espesura. Cuando ya faltaba menos de medio metro para llegar a la reja de entrada, la cabeza se relajó, tomó aire que pareció escapar demasiado rápido y descansando un momento, se giró hacia mí y me dijo:
- No, gracias, por ahora no queremos nada.
En ése instante me agaché, alcé la cesta con salamines y panes caseros, me colgué al hombro la ristra de ajos y agarré el atado de escobas, dispuesto a caminar a la casa más cercana, rogando que compraran algo de mi mercancía para llevar unas monedas a casa.

miércoles, enero 04, 2006

El vecindario [Alienado]

A veces la lluvia hace agujeros a la cueva, por donde entra luz de luna.
Damián colecciona piedritas para taparlos.
Damián cree que ahí van los aliens que murieron siendo buenos.
Eso decía su religión alien.

Damián tiene una cueva acogedora; es húmeda y fría.
También tiene un sartén, y una heladera llena de vasos de leche y huevos fósiles.
Damián sacó una pequeña antena al exterior durante el eclipse.
El espera que un día su radio deje de gritar estática.

Mosquita, su reciente amiga, le cuenta sus aventuras en vida.
Damián la escucha con la mayor atención mientras ella le habla.
Damián está cansado y le dice a mosquita: "Quiero besarte pero no tienes mejillas".
Damián se duerme sobre su brazo, y mosquita en el pelo.

Damián despierta solo y con un cadáver.
Mosquita vive poco y ya era vieja.
Damián a veces sueña que entra en su pintura de Venus,y está acostado junto a su hermosa Elizabeth, y le regala algo lindo mientras mosquita luce sus anteojos tomando sol en una espiga.

La radio dejó de chillar estática y ha comenzado a cantar.
Damián corre al pasillo secreto y comienza a excavar la pared.
Toda la cueva se llena de gas, y Damián muy feliz y cansado comienza a dormir.
Damián comienza a morir y sueña con Elizabeth.

Damián abre los ojos mientras amanece en Venus.

martes, octubre 04, 2005

Mi buen amigo Chuky

Estoy lleno de abejas
Que murierion en el oceano

Llevo puesto
sangre de un gallo
cuando voló
como paloma

Soy un pantano
de ranas alucinógenas

jueves, agosto 11, 2005

El vecindario [La caminata]

Bueno.. yo iba caminando por el borde de la ruta contando los granitos de arena enterrados en el asfalto y viendo la basura al borde. Día tranquilo, desértico, casas destruidas de una villa miseria a mi alrededor y un perro muerto en el medio de la ruta.

El perro asesinado me dice: "Hey vaquero! No está fuerte el sol acaso?", lo miro con una sonrisa amigable y el se pone a cantar algo en ingles: "Calling carolina, hey hou, hey hou. Losing Carolina, come back Carolina. Carolina Carolina Hey Come back to me...".

Hola! -le digo yo - ¿que andas haciendo a esta hora por acá?. Pasa un auto y lo pisa -OUCH! -dice el perrito. Entonces me meto en la ruta, lo agarro del collar y lo arrastro hasta el borde de la ruta, luego busco un banquito de plástico tirado semi destruido y me siento junto al perro, con él junto a mis pies.

El señor perro gira su inflamado, desorbitado y sangrante ojo hacia mi y me dice: "hey vaquero tu si que eres alto. ¿no te casas conmigo?" y comenzamos a reírnos a carcajadas a la par.

Yyy charlamos un rato largo, hasta sacó un violín chiquito debajo de su axila y se puso a tocar algo de Country como para mostrarme sus habilidades. Obviamente no era un perro común... este tenia 6 dedos en su pata delantero-derecha lo que le permitía tocar con mas gracia y melodía. Durante horas nos quedamos cantando juntos, mientras comenzaban a llegar las moscas. Bah!! llegó una sola y se puso a cantar con nosotros en tema del marinero perdido en Constantinopla.

Al terminar el tema, la mosca nos pregunta sobre lo que nos aqueja, se para en mi ojo y se mete por la comisura para adentro. Al rato sale y me dice: "Ya veo!!, resulta que tu corazón raspa en una costilla", se quedó pensando un rato y volvió a hablar: "Se lo que haremos".

El Señor perro interrumpe y dice un versito: "Mi costilla, mi costilla está rota, y a mi pecho cuando pecho explota".

La mosca se posó en mi ojo y apoyó su boca sobre mi pupila como un estetoscopio tratando de oír el corazón. Dime que ves! - dice la mosquita mientras la observaba quieta en el centro de un triángulo amarillo girando con un fondo de una pintura famosa (no se de quien ni como se llama). Una mosca con un tutu exageradamente grande - Le respondo yo con seriedad. Se levanta de mi ojo y dice: "listo!!... curado".

El Señor perro y yo nos miramos sincronizadamente e hicimos un gesto de desentendidos. El Señor perro se despide y comienza a arrastrar su cuerpo flácido con las patas traseras para ponerse de nuevo sobre el asfalto. Yo me paro de la silla, agarro a la mosca con mis dedos tratando de ser cuidadoso para no aplastarla y la pongo en mi hombro. Y sigo caminando, tarareando "the in sense song" de Courtney pine.

lunes, julio 11, 2005

N/A

El sol de la ventana rozaba mi cara mientras me frotaba los ojos mojados con la mano. Ya había dejado de pensar en ese sueño, pero todavía permanecía sentado al costado de mi cama viendo las cortinas. No cambié mi gesto insípido y decaído, solo mis ojos temblaban, pero no hicieron mayor movimiento por horas.
Finalmente cronometré mi reloj mientras intentaba reprimir el llanto. Era imposible no hundir mis labios a sacudidas, o mantener seca mi nariz. 19:07:34.23 del día de mañana.

Que desayuno mas amargo tuve esa mañana, encima estaba solo. Pero luego me alegró un poco caminar hasta la armería. Como que el sol es muy lindo... ¿no?. Pude pensar en miles de maravillas en esa caminata de dos horas, hasta pensé en fumarme un pucho. Estaba por prender el cigarro cuando pensé: "No!!... hoy dejo este cochino vicio para siempre!!!". Menudo orgullo sentí cuando tiré todos los cigarrillos, y luego comencé a reírme de mi ocurrencia, mi gracia y de mi mismo como viéndome en tercera persona.

Ni bien llegué a la armería pregunté por un arma efectiva y legal, y una mascara antigases cargada. El pobre señor de la tienda quedó anonadado y perdido al verme hacer tal pedido con tanta decisión. Hubiese esperado algo mas divertido que un simple "Es raro ver que alguien compre máscaras, de hecho solo hemos vendido 3 desde hace años", pero bueno... lindo comentario también.

Que pocas ganas tenia de comer en mi casa, así que me comí un McDonald y me tiré en el banco de una plaza bonita mientras tomaba un whisky (de los buenos... esos que valen como 80 pesos). Cuando quise acordar ya era de noche y me fui a mi casa, pero no miré el reloj porque me daba miedo. Que rara que es esa condición de decaer mientras decae el día, pero casi siempre le pasa a todos... ¿por que será?.

Que tarde!, y que ganas de dormir, pero no pude dejar de pensar, que feo!. Pienso que tal vez podría ir a robar, matar, violar o nadar desnudo en una pileta climatizada mientras como sushi. Cuantas cosas podría hacer, que nunca he probado, y para colmo no haría ningún mal a nadie haciéndolas. Podría haber salido desnudo gritando: "Hoy besen a quien aman y duerman juntos", pero la verdad que poco me importaba ahora. Lo que mas deseaba en el mundo era dormir desnudo y cálido junto a vos. Nunca te lo dije, pero cuando acerco mis manos a tus omóplatos desnudos, siento como si hubiese un campo magnético, o alguna de esas cosas raras que nadie entiende (por lo que me ahorro la explicación aquí). Pensaba si tal vez te gustaría que esa noche me sintiera enamorado y dejara de reprimir mi corazón. "SI!!! TE AMO!!!, no me puedo aguantar y otra vez vuelvo a sentir ese pozo en el pecho... tengo la piel erizada y a mis brazos les falta algo"
....pero no podía llamarte, me pediste tiempo para pensar, y eso siempre significa "no voy a volver". Que pena, otra vez reprimí mi corazón y me sequé las lágrimas. Bajó el sueño y dormí como un rey.

Casi me había olvidado de todo cuando me levanté, pero quise ver el reloj, y decía: "-10:12:23.xx" (No podía ver los últimos números porque disminuían muy rápido). Otra vez la pena... otra vez el desayuno, pero no sabia tan amargo, de hecho el sol le daba un color muy lindo a mi te.
"Que mierda!!!" dije mientras guardaba el arma y la máscara en la mochila para ir a saludar a mi familia. Ojala hubieses visto sus caras!!!, jajaja, hasta algunos hicieron la típica pregunta: "Que me vas a pedir?". Que bonito!, hasta les llevé al perro al trabajo para que les moviera la colita.

Más tarde me comí un panchito en el puente, y lo raro es que ni ganas de fumar tuve. Corrí hacia tu casa mientras me reía sin aliento, hasta que finalmente me tomé un taxi.

Finalmente terminé en tu puerta y con toda la euforia toqué timbre. Me atendió tu madre y me dijo que no estabas. Entonces mi sonrisa comenzó a decaer de a poco. Pero cuando comencé a darme la vuelta me tocaste el hombre con una de tus alas. Volví a voltear, pero solo te vi a vos mirándome como si nada y comiendo un sanguchito. Di un paso atrás, miré el reloj que decía "-1:25:38.xx" y muy serio te dije: "Haceme un favor: andá y abrazá a toda tu familia por vos y por mi". Te dije "chau" y me fui caminando con la cabeza abajo. No recuerdo, pero creo que me tomaste del hombro y me dijiste algo con la boca llena. No lo se, tal vez me pareció, pero poco le importa a un zombi cubierto de parásitos capilares y mal aliento como yo. O eso creía ser en ese momento.

Ahora como que estoy mejor. No me canso de ver las bandadas de pájaros atravesando el cielo como si fuesen un enjambre enfurecido; los perros ladrando y desesperados por no saber hacia donde ladrar realmente. Pero la mayor maravilla la hacer el Sol, matizando las Nubes con un tono rojizo. La verdad que es un atardecer poco común, y el chillido de los pájaros extraña a todos.

Y bueno... el reloj dice "-00:16:38.xx" y los pájaros comenzaron a bajar al piso. Se paran y se quedan quietos, ni cantan siquiera. JAJAJAJAJA!!! los niños los patean y solo se vuelven a parar donde caen y se quedan quietitos, que simpático (no así con los pendejos de mierda).

Como que la gente comienza a sentir algo extraño. "YYYYYY ahora!!!" dije justo cuando empezó a disolverse la atmósfera y la gente comienza a gritar. Me pongo mi mascarita y me quedo viendo el cielo. Es increíble ver como las Estrellas comienzan a verse mejor que en la Noche mas clara mientras el Cielo deja de ser celeste para volverse negro poco a poco. Desearía que la gente viera el Sol como lo veo yo en vez de estar asfixiándose por doquier. Pero será un lujo exclusivamente mío no más.

Que mal!... ya me había distraído, pero el reloj marca "-00:0026.xx". Juro nunca haber sentido tanta impotencia, solo 24 segundos para hacer algo por vos, y nada por hacer. Nunca creí en un dios, pero si existe que te tome en sus brazos. "00:00:00.00" y yo estoy llorando.

Voy a seguir viendo este paisaje único hasta que dure el oxígeno de la máscara... Tengo la pistola cargada.
Y pienso: "Finalmente dejé de fumar... JAJAJAJAJAJAJA!!!. A este oxígeno le falta nitrógeno".

viernes, julio 01, 2005

En el limbo

Miles de relojes no alcanzaron para despertar a mi ángel,
y el teléfono sonaba toda la noche.
Solo era el diablo cada vez diciendo que iba a tener que esperarlo.

Entonces fue que caminé empujado por la monotonía y la imparcialidad,
Salí buscando un rincón mientras desaparecía entre la espesa niebla;
la niebla con la que inundó el paisaje tu falta de atención.
Encontré un cómodo rincón cálido y acogedor donde me incorporé,
mientras, la niebla acumulaba agua en mis pulmones tapando bronquio a bronquio.

Al final empecé a sentir el sueño, poco a poco, hasta dormirme por completo.
Comencé a caminar muy tranquilo por ese largo túnel con el resplandor a final,
pero no vi ni un recuerdo, solo el resplandor al final y el humo de mi cigarrillo.
De repente, una luz aún mas brillante parpadea desde mis espaldas, de donde vine.
Parecían miles de faros y balizas, como si alguien estuviese buscándome,
así que solo por curiosidad me volví.

Casi llegando al comienzo, siento ese olor particular tan atractivo,
sin aguantarme comencé a correr a las luces sabiendo que el ángel había despertado.
Completamente desesperado me tropezaba tratando de llegar al fondo,
donde me buscaba desoladamente mi ángel despierto.
No tardé en llegar, que bueno era estar nuevamente.

El teléfono sonó toda la noche pero no atendimos ni desconectamos...
seguro era nuevamente el diablo que me consolaría en la mañana.
En la mañana mi ángel seguro volvería a dormir.

viernes, junio 03, 2005

La pequeña bola naranja

La niña otra vez juega con eso.
Se ve tan hermosa tratando de cargarlo que casi no puedo dejar de sonreír. Es tan grande como su ser.
Pasa mucho tiempo tratando de subirlo junto a ella por las escaleras.Mientras se sonríe a pesar de tan arduo trabajo.
Escalón por escalón, siempre se da vuelta para traerla consigo.
Que bello es observar. Le ríe celosamente a su bola en el jardín del sol.

Tal vez si siempre fuese así. Pero no faltan momentos en que se enoja con eso casi sin razón.
Luego comienza gritarme desesperadamente. Tal vez sea para que la proteja inútilmente de su objeto favorito.
Es desesperante no entender sus gritos. Mis nervios se desgarran tratando de entender.

No soy un monstruo, pero no soy una figura paterna...no soy un padre.
Así es como desapareció.

Entre lineas hay mas de lo que pudiera yo escribir.

Cuanto ha pasado hasta que volvió?... otra vez con su bola naranja.
Otra vez siento la comodidad de mi viejo hogar siempre en desastre.
Y la niña vuelve a llorar. Tal vez si pudiera hacer algo.

Sabes niña?... quiero disfrutar tu regreso siempre al máximo. Esto no va durar mucho.
No me grites a mi, no me grites porque nadie podrá tocar tu bola. Siempre tan dentro tuyo.
No hay razón para que la muerte sea triste. Después de todo es como la separación en vida de alguien a quien quieres. Y ya nunca podrán decir eso que debieron decir.
Es tan feliz la muerte, y tan alegre como ofrecer helados a la bola naranja.

domingo, marzo 06, 2005

50º C

Acababa mi cena junto a una hermosa dama. Ella tenia unos ojos claros que me observaron toda la velada de la forma mas suave que alguien pudiera, y aún así extrañamente me sentía cómodo. Tenía el cabello negro azabache, no mas bajo que sus orejas; y la tez tan suave y delicada que invitaba a acariciar la parte posterior de su esculpido maxilar. La muchacha, apenas cumpliendo sus 22 años, ya poseía grandes conocimientos; la amabilidad de un santo; y una inocencia que asomaba bajo infinidad de tabúes.

En un esfuerzo por superar sus gestos de amor me ofrecí a prepararle un café. Le pregunté: -¿como lo querés?, -y respondió amablemente: -sin azúcar, con crema y tibio. Ahí algo contrajo todos los músculos de mi espalda, y me fui caminando a la cocina sin decir nada y mirando al suelo mientras clavaba los dedos en la palma de mi mano. Llegué a sentir la sensación mocosa trepando mi medula espinal y clavándose en el centro de mi cerebelo. Medí cuidadosamente la perilla de la hornalla para que el gas soplara la llama más fuerte y amarilla; y puse la tetera encima. Tibio -susurré- .... tibio. Me quedé mirando ciegamente mi reflejo deforme sobre el acero de la tetera mientras el agua se evaporaba imaginándomela a ella. Sus globos oculares giraban 180º en todos los sentidos, mientras mostraban párpados soldados a sus dorsos; tenía un gesto tieso sobre su cara verdosa repleta de varices, y sus orificios nasales absorbían la punta de su deforme mentón. Tibio - pensé con odio-... tibio. Habiendo millones de palabras en nuestro lenguaje como amor; enano; o un cochino perro ebrio en el medio del Ártico... ¡y ella pide su asqueroso café tibio!... ja!... TIBIO. Sin poder contenerlo más, golpeé con fuerza la tetera derramando la mitad del agua en el suelo. No noté como se quemaban mis pies en el agua derramada; solo pensaba en su horrible gesto vomitando tan asquerosa palabra.

Sentí como crujían los músculos de mi espalda mientras se descontracturaban uno a uno. Con la paz de mil dioses abrí la alacena y agarré un frasco con un eficiente veneno concentrado para insectos rastreros. La ligereza que me cubría solo se comparaba con la estadía en el útero materno; pero mis ojos aún temblaban desorbitados. Preparé el café tan caliente como el ambiente lo permitía; vertí solo tres gotas del concentrado con deltametrina (0,75%) en el café de la bella dama; y caminé con la fuente hasta el comedor. Aquí tenés tu café, -dije con la mas cálida sonrisa- tibio, como te gusta.

Los restos del rey de picas

Buenos días mi cielito, estuviste tan rojo hoy... estoy pensando en extrañarte. Es raro pero no tengo ganas de culpar a nadie, ni me interesa; tal vez sea por estar cansado, tal vez debo estar soñando... creo que no.

Buenos días mi vida, recuerdo que aprendí a odiarte y aún así te necesito, luego te amé tanto que me diste lo mas importante... amor, y esto me hace necesitarte mas, mejor dicho... ya no. Realmente espero no saber por que no puedo llorar.

Es increíble lo que se puede lograr. Siempre quise ser maestro pero no tenía paciencia, y aún así estoy satisfecho en mi intención.Tantos recuerdos ahora parecen hermosos siendo que algunos fueron solo mierda.

He visto duendes en sus alcantarillas y monstruos bajo la oscuridad, y les tuve miedo. Sin embargo hoy he estado tranquilo y hasta eufórico, quizás segundos tristes.Conozco de mutantes y milagros, ¿entonces por que no entiendo mi estado?. Esto es todo tan gracioso, que hasta puedo imaginarme, JA!, ¿no ve veo lindo arrastrándome en el caos? JA!.

Buenos días a ti también, admito haberme asombrado... TU! tan radiante y atómica. Pues adiós mi amor... mi vida. Estúpida bomba.

Diario del creador

Cosa Nº 1: Lo primero

El primer día, aspirando una desesperante bocanada de aire, desperté. El segundo día creé la tierra, las personas y el universo. Y el resto de los días descanse sobre mi creación.No habría forma de que algo creara algo tan detalladamente perfecto como este mundo. Le hice flores, piedras, agua, hombres, mujeres, guerras, pestes, ladrones. Puse especial enfoque en lo que a mi me rodearía. Me aseguré de que siempre hubieran personas que me amen y me odien; buena y mala suerte; dolor y pasión. Por supuesto, no podría yo estar mal sobre mi propia creación.

Cosa Nº 2: Adentro

Yo, El Señor, podría vivir en la nube sobre mi propio trono, pero nunca dejé de admirar mi reacción. Por supuesto que no se como la creé.. nadie recuerda su segundo día de vida, y ellos son mi imagen y semejanza.Decidí vivir en la tierra, enlazarme con los humanos y observar cada detalle en los que solo los filósofos se fijaban. Especialmente me enamoré del oscuro y parpadeante cielo nocturno. ¿Que mente brillante antes de mi me dio tan perfecta idea?, ¿hubo alguien antes, que puediese dotarme de tal creatividad?. También me gustaron mucho las mujeres, ya que por eso elegí ser hombre. Todas eran tan bellas que hacían un complemento perfecto, cuando sus cuerpos se enfrentaban a las estrellas nocturnas.Podría hablar horas de los pájaros, el aire fresco de las mañanas y los destellos nucleares, pero odio llorar de felicidad.

Cosa Nº 3: El fin

Durante años estuve bajo el ala de una mujer a quien llamaba madre. Fue estricta conmigo, y me obligó a "las responsabilidades", pero no la culpo. Siempre ignoró mi naturaleza y pensaba en mi futuro como humano, siempre obligado a lo que no le gusta. Pobres humanos, pocos usan su gusto para hacer de todo un placer; apenas han entendido la vocación.Luego con el correr del tiempo disfruté de otras cosas típicas de las edades humanas. Siempre me desfasaba en las edades, ellos crecen más rápido que las capacidades de sus sentidos. Viven encerrados y duermen esperando a que sea mañana.Pude ver todo hasta donde me limitaron mis sentidos ficticios y la monotonía tornó mi vida exasperante. Dije :"Vamos pequeño planeta!!!, estalla en un has de purpurina para que yo te contemple". Y así puse mi dedo en el suelo y mis sentidos aún más amplios se deleitaron con tan bella escena. Una supernova cundió el pánico durante días en las personas, mientras unos pocos festejaban disfrazado o desnudos. Luego llegó la explosión que sacudió la inmensa masa de tierra agua, energía y cadáveres en miles de trocitos brillantes dentro del todo oscuro y resplandeciente. Ya las estrellas carecen de belleza frente mi nueva creación.

Cosa Nº 4: El bosque

Habiendo sido tan fugaz la explosión que duró solo unas décadas, me sentí aburrido nuevamente. Esta vez decidí vivir dentro del tronco de un viejo árbol quemado. Tenia una pequeña ventana donde se alcanzaba a ver el bosque quemado a dos metros del suelo. Solo me sentaba a tejer en mi sillón mientras veía la luz filtrándose en los agujeros de las paredes. Cocinaba huevos y me sentaba tranquilamente en mi pequeña mesa a beber vino y comer.Ese viejo hombre afuera, pasaba las horas tocando la triste melodía en su piano. Que bella canción, tan pasiva, tan triste, tan profunda. Las teclas agudas suenan apenas llorando sobre las cuerdas.Aveces me acercaba al viejo para entregarle agua y comida. El sonreía detrás de su gastado rostro, y sus ojos recubiertos de líquido. Era él tan solo un sobreviviente de de la supernova. Otro de los pocos que habían perdido todo.Con el paso del tiempo, mientras me bañaba en el río supe que esa era la soledad y la desolación de la que tanto hablaban. ¿Pero como?... ¿tan terrible es?... después de todo no es diferente de la sociedad que hubo antes. Todos estaban solos!!!, solo que ahora se permite llorar en público.

Cosa Nº 5 Patos y amor

El hombre del piano un día rompió su silencio y me pidió algo casi a suspiros, como si supiese quien era yo. El dijo: "quisiera que todo fuera como fue antes"; y así lo hice. Reciclé mis recuerdos para convertirlos nuevamente en personas, un pato y otras cosillas que antes hubieron. Primero reconstruí a la gente que conocía, luego hice a los chinos, y finalmente al resto. El viejo me sonrió con los ojos más húmedos que nunca, mientras caía de rodillas frente a mi. Tiré de su cabello para levantarlo, lo abracé y le dije: "Ya eres joven de nuevo pobre alma en pena, y tu familia vive donde estuvo tu recuerdo durante estos años". Tal vez no quería decir esa frase tan estúpida, pero soy un dios, y los dioses que crearon los humanos usaban esas estúpidas frases.Esta vez quise probar el amor. Tanto tiempo entre estos insensibles y nunca se me había ocurrido probar algo que los hace tan feliz.Mi ego me decía que creara una diosa a mi nivel, pero mi humildad decía era yo el que debía hacerme humano. Así lo hice, creé una mujer según el modelo promedio que demandaban los hombres. Y yo me empecé a comportar como humano.Así fue como empecé a enamorarme. Fue la sensación más intensa que sentí en toda mi existencia. Casi no podía verla sin llorar de alegría.

Cosa Nº 6 La familia

Que bellas épocas pasábamos enamorados Ascensión y yo. Casi había olvidado mi esencia y adopté por completo el papel de humano. La mejor de las cosas era cuando nos reíamos de nuestras estupideces mientras juntábamos las narices. También me gustaba tomar su pequeña mano al caminar; su cara feliz; su pelo y su olor. La veía horas mientras dormía con la boca abierta y la saliva en la mejilla.Fueron buenas épocas hasta que un día ella dijo que estaba aburrida de todo. Error grave el mio al decir la verdad. Aún veo su cara cuando dije: "Por eso creé a los payasos". Estuve confundido durante horas tratando de entender su enojo."SE VOLVIÓ LOCA!!!!!" pensé en el momento, hasta que me dí cuenta de que la gente siempre le busca el sentido sarcástico a las frases. Debe ser por eso que no se popularizó mi imposición de la verdad.Al final encontramos una salida muy buena a su aburrimiento: tuvimos hijos. Era una niña y un varón. Ambos tenían nombres de 5 letras, pero no tengo idea de por que elegí esa regla. Algo en mi mente decía 5 letras y 2 sílabas, y se repetía durante horas mientras buscaba trabajo en los diarios.

Cosa Nº 7 Capitalismo

Un día volvía de mi trabajo y Ascensión me dijo: "Ya no nos querés, estás todo el día haciendo otras cosas y no estás con tu familia". Tardé 17 minutos en cerrar la puerta, mientras mi frente estaba arrugada al punto del dolor. Siempre pensé que el trabajo en favor del prójimo era un sacrificio amoroso.Pronto el pequeño me preguntó por que nos separábamos. Hice un esfuerzo por dar una respuesta de un hombre común en una situación en la que yo nunca estuve y dije: "Pregúntale a tu madre, su abogado no me deja hablar contigo". También pensé en dejar el trabajo para no tener que darle dinero a Ascensión. Es lo que hubiese hecho un humano promedio. En cuestiones de amor hice tanto a las mujeres como a los hombre unos locos extraños. Quise rehacerlos a ambos grupos, pero odiaría modificar el mundo de mis hijos.Ahí tomé toda mi poder para generar cosas abstractas y creé al capitalismo. Luego hice otro mundo y se lo vendí a Greenpeace para que lo cuidaran. Era una ganga, solo 8 millones de euros. Doné 2 millones a una institución, deposité 4 millones en una cuenta que heredarían mis hijos cuando crecieran, le dí 5 Euros a un borracho y me guardé el resto. Creé una isla llena de mujeres hermosas, personas sonrientes, cocos, sombrillas, hamacas y jugos de frutas raras. Lo llamé Hawai que no se que significa. Luego le agregué una "i" más al final, para llevarle la contra a la estúpida voz que decía: "5 letras y 2 sílabas".Ahora vivo en Hawaii disfrutando de la hamaca, las estrellas y las mujeres. Todos los días me despierto esperando a que mis hijos crezcan y me visiten. Tal vez, algunos segundos espero la disculpa de Ascensión.

Cosa Nº 8 La biblia

Cada cosa en este diario no es equivalente a un día en la creación del universo. Y para evitar la semejanza con su estúpido libro cristiano he incluido esta 8 va cosa.